sábado, 22 de marzo de 1997
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Inicio este blog con la intención de recordar y guardar toda una vida, desde el principio de los recuerdos de ese niño inquieto y travieso del barrio de Pardaleras de Badajoz de entonces hasta nuestros días, reflejando desde aquella época en lo que se hacia, no se hacia con la intención de hacer deporte, se hacia por que al no disponer de casi nada todos nuestros juegos se relacionaba con algo que con posterioridad ya lo hemos echo como deportes.
No voy a enumerar un sin fin de juego en los que nos entreteníamos donde se ejercitaba todo el cuerpo, pero si que me voy a entretener a comentar de lo que recuerdo con mayor claridad, y que luego ha sido la actividad deportiva que mas me ha marcado, se trataba de cuando hacia buen tiempo junto con dos-tres amigos nos descalzábamos y llevando las sandalias de la época en las manos corríamos por correr no se cuanto tiempo al caer las tardes sintiendo el calorcito del asfalto en los pies descalzos, sensación que aun recuerdo a pesar de haber pasado muchos años.
Luego vino mi época del arbitraje, en la que tuvo mucho que ver el arbitro Pedro Diaz, que mas adelante no solo llego a ser el suegro de mi hermano mayor (Paco) y también el mio, que nos "envenenó" con esa afición en la que ya se necesitaba cierta preparación física, que aunque no era autenticamente obligatorio el entrenar, yo era junto con otros de los incondicionales en hacerlo, porque yo disfrutaba y por que no decirlo también, porque en aquella época de que se tenia lo justito, los árbitros de mayor categoría como eran los inolvidables Pablo Sanchez Ibañez, ya de segunda división, Ramón Prieto Sanchez, Domingo Robles Piron, Romulo Garcia Marquéz, Tomas Villaverde y otros, nos invitaban cuando llegaba los domingos de pre temporada a un suculento desayuno a base de frutas y un buen vaso de leche con canela.
De aquella época de arbitro en la que destacaba por mi preparación física, aun guardo recorte de prensa de un partido en la que en una de ellas decía al haber jugado en un barrizal "Que el único en mantenerse de pie fue el arbitro al tener poco peso y una buena preparación física".
Otra anécdota y al guardar relación directa con este tema, fue cuando un jugador en Mérida quiso agredirme y salio corriendo detrás de mi, y después haber corrido todo lo largo del campo y siendo consciente del enorme ridículo que estábamos ofreciendo, me gire y me fui contra el, porque desde luego no me hubiese cogido . . . nunca.
En aquellos tiempo y durante muchos años y al margen del entrenamiento con los árbitros teníamos un grupo mas o menos numerosos dependiendo de la época del año, que entrenábamos cuatro días a la semana en los diferentes campos de fútbol de la época antes de irnos cada cual a su trabajo, en el que el entrenamiento se trataba de un "pachanguita"en la que yo participaba en el calentamiento, pero luego salia del recinto donde estuviésemos y me dedicaba a correr el mismo tiempo.
Después de esta época del arbitraje continué entrenando participando en un sin fin de pruebas deportivas ya de veteranos, hasta que se me origino una lesión de rodillas en la que me dijeron, o que pasaba por quirofano o dejaba de correr, lógicamente opté por la segunda alternativa al tener amigos de mi primer circulo con problemas en las rodillas después de haber pasado por quirofano, y es que entonces eran otros tiempos al estar hablando de hace casi treinta años, teniéndome que decidir definitivamente a caminar.
Hago esta "presentación" para que quien pueda estar interesado y no me conozca lo suficiente, sepa de mi dilatada vida dedicada al deporte.
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